De mi infancia extraño la simplicidad.
En vez de jugar como hacían todos los demás,
en mi tímida inocencia solo observaba
con la mirada sana e ingenua ante la vida,
en silencio
con la ventana abierta a las palabras
que decidí no pronunciar.
Aprendía de las experiencias ajenas.
En mi adolescencia, construí muros
y los llené de capas para protegerme.
Después continué cubriéndome con capas
para ocultar toda mi fragilidad.
Yo siempre fui de contemplar y analizaba.
Y crecí de esa manera.
Soñadora, reservada, alegre y melancólica
sigo siendo igual en ese terreno.
Pero no importa el porqué, simplemente fue así.
Comprendo muy bien a la pequeña Miri.
con esa capacidad de asombro
y la facilidad para detener el tiempo.
Porque hoy tengo mucho de esa niña en mi interior.
Removiendo ese lugar de las emociones
y transitarlo es un poco raro a mi edad.
Supongo que nunca necesité recapitular en la memoria.
El pasado siempre fue como una señal
o una ocasión perfecta
para redefinir las nuevas expectativas
como un indicador referencial.
No como un lugar para quedarse a vivir y envejecer,
sino como escala en un recorrido
para acercarme más a mi misma.
Ese retorno eterno a la reconstrucción personal,
algunos espacios vacíos quedaron.
Viajar hacia adentro, a ese pasado
simple, solitario y tranquilo.
retomar contacto
con el transcurso del tiempo.
Aunque emocionalmente
haya algunas cosas no atravesé.
Ahora, con las mil vueltas emocionales,
me subo a la calesita de mi infancia.
Mi estructura está girando a flor de piel
con mi “yo adulta”
intentando volar como "una niña"
flotando por todo ese despliegue de capas
silenciosas y en calma.
Me incomoda un poco, y bueno.
De eso se trata algunas veces.
Enfrentar las incomodidades,
despejarse y elegir un espacio neutral.
Eso intento hacer desde siempre
poder conectar con una imparcialidad perfecta
llegar a lo genuino y real.
¡Atravesar, suspirar y abrazar el viaje!
Porque esto sigue
y siempre hay más…
Queda mucho tiempo para jugar.
Dar vuelta la página.
Hoy, asomada entre silencios y suspiros
pasan otras cosas.
No estoy sola
comparto muchos momentos hermosos
con mis seres amados
Todo es sencillamente genial.